martes, agosto 11, 2015

Vecindario

Hoy he pasado la tarde asomado al balcón. Enfrente mi vecina, ha hecho lo mismo. Nos hemos mirado largo rato, fijamente, e incluso ha habido atisbos y tentaciones de saludarnos. Pero no lo hemos hecho. Hemos pasado minutos, horas, días, años, mirándonos fijamente el uno al otro, esperando a ver quién saludaba primero. Si el viento cruzaba en nuestra línea de visión una cortina o una sábana tendida, la apartábamos rápidamente para seguir mirándonos. Algún día pasará, mientras tanto, seguiremos mirándonos en silencio...

No hay comentarios:

Publicar un comentario