jueves, agosto 04, 2011

Estropeado

Volvió a pulsar una y otra vez aquel botón mirando a su alrededor para ver qué ocurría. Cansado después de apretar más de cien veces, se alejó pensando que no funcionaba. Dos calles más abajo, ciento cuatro enanitos vestidos de rojo bailaban claqué sobre la acera.

lunes, agosto 01, 2011

Arcoiris

Caminando sobre el arco iris a paso firme, me adentré en la última nube de la tormenta. Una figura apareció ante mi, flotando sobre el vaporoso velo nebuloso, con el ceño entrefruncido y el gesto alicargado.

-¿Quién eres? - pregunté.
-Soy tú - respondió.
-¿Cómo puedes ser yo, si yo sé que yo soy yo?
-Sí, pero aún así, yo podría ser tú y tú podrías ser yo, aunque no supieras que tú eres tú, ni yo tuviera conciencia de que yo soy yo y soy tú a la vez.

A veces llega un momento en el que es mejor terminar la conversación, dar media vuelta y descender el arco iris silbando una desenfadada tonadilla.